Fuente: Fundación Mexicana para la Dermatología
El 80% de la población general adulta padece varículas, también conocidas como “arañitas en la piel”. Este fenómeno afecta cuatro veces más a las mujeres que a los hombres, se observan con mayor frecuencia en mujeres de entre 14 y 48 años con una prevalencia del 50%.
Las varículas son pequeñas várices que se presentan como venas dilatadas de rojo brillante a rojo vino o azul. Alrededor del 20% de las mujeres con varículas, llega a tener várices grandes y en ocasiones ocultas.
Están predispuestas a factores hereditarios, conductas sedentarias (permanecer parado o sentado por largos periodos), uso de anticonceptivos, problemas hormonales, embarazo, afecciones del hígado y obesidad. Existen además situaciones que llegan a exacerbarlas tales como fumar, falta de ejercicio e incremento de peso.
Las varículas comúnmente se presentan en las piernas y muslos, sin embargo, también llegan a figurar en la cara -alrededor de la nariz, mejillas o parpados- así como en el tórax anterior o en la “v” del escote.
Los síntomas o molestias no son tan frecuentes, pero la mayoría acude a consulta por motivos estéticos. Tampoco representa un problema físico, y cuando así ocurre es por asociación a venas de mayor tamaño.
Los métodos más apropiados para eliminar las varículas son la inyección de substancias esclerosantes, la escleroterapia o la fototermolisis con láser.
Para disminuir el riesgo de padecerlas, o su incremento, se recomienda el uso constante de medias elásticas y una vida más activa. Además, es importante considerar para los viajes largos de más de tres horas una hidratación intensa, movilidad en las piernas y levantarse y caminar de vez en cuando.