Sabemos que los ejercicios son la forma por excelencia de perder peso y, justamente por eso, existen muchas personas que se decantan por correr para reducir algunos kilos de más.

Correr es sumamente fácil, ¿quién no sabe hacerlo? Además que puedes hacerlo en tu parque de preferencia, trazar una ruta de tu conveniencia escuchando tu música preferida, e incluso lo puedes hacer con buena compañía. Antes o después de ir a trabajar, en fin, puedes ejercitar grupos musculares como y cuando quieras.

En ese sentido, nos complace destacar algunos consejos para adelgazar mientras corres:

Ritmo constante

Muchas veces pasa que nos sentimos con mucha energía y ganas y durante los primeros minutos de camino queremos correr como Usain Bolt. No es lo correcto, es conveniente mantener un ritmo constante, así no estés corriendo a toda velocidad.

El metabolismo de las grasas no comienza al empezar con el ejercicio, por lo cual es importante que empieces a correr con un ritmo bueno pero constante.

Terrenos irregulares

Cuando ya sientes que superas con facilidad los terrenos planos entonces puedes evolucionar y pasar al siguiente nivel. ¿Cómo? Intenta haciendo tus ejercicios en superficies inclinadas, lo que requerirá más energía y esfuerzo de tu parte, lo que se traduce en una pérdida de calorías más acelerada. Si no te quedarás estancado corriendo siempre al mismo ritmo en zonas del mismo esfuerzo.

La intención no es que todos los días te vayas a un cerro a esforzarte como loco para quemar calorías de forma más rápida, pero si es buena idea que de vez en cuando hagas cambios de superficie, entre plano e inclinado, de forma que los requerimientos a nivel energéticos cambien y aproveches al máximo este ejercicio.

Cambia de recorrido

Para mostrar resultados aún más visibles es conveniente cambiar ciertos factores relacionados con el entrenamiento, como el recorrido. El problema de hacer siempre la misma ruta es que deja de ser retadora.

Los músculos no se acostumbran a un mismo esfuerzo si cambia el recorrido, por lo que lograrás quemar más grasa en tus carreras.

Antes de salir, traza una ruta diferente, de tal forma que tu cuerpo no se acostumbre a un mismo ejercicio.

Digo lo mismo que en el punto anterior, la idea no es que cambies todos los días de ruta como si vivieras en una ciudad con rutas infinitas. La idea es alternar la ruta y los circuitos – con día de por medio, por ejemplo – y además los ejercicios se harán más entretenidos.