El insomnio suele aparecer cuando más estresadas nos sentimos. Estamos agotadas, pero no podemos dormir. Aquí te damos estos consejos que te aseguran conciliar el sueño cuando tu estrés está al máximo.
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Identificar qué ocasiona tu estrés y tratar el problema al siguiente día
Si puedes averiguar la fuente de tus preocupaciones, hazlo. Maneja tus problemas mucho antes de acostarte. Si no lo haces, tu insomnio agudo podría convertirse en crónico.
Cuidado con la atmósfera de tu recámara
Las condiciones ambientales deben ser perfectas. La temperatura no debe ser muy caliente ni muy fría; contar con un buen colchón y buena almohada es esencial. Pequeños detalles que antes no te molestaban, cuando estás estresado pueden desencadenar en insomnio, así que crea la atmósfera perfecta en tu habitación.
Eliminar todas las fuentes de cafeína y alcohol
Algunas personas son más sensibles a las sacudidas de la cafeína que otras, así que mira cuánto estás consumiendo y cuándo. Es posible que tengas que poner un alto al café a las 2 pm, o incluso antes si todavía estás luchando por dormir por la noche después de hacer ajustes. Cuida las fuentes ocultas de cafeína, como el chocolate, té verde y negro, refrescos y algunos analgésicos.
El alcohol es engañoso, mucha gente cree que eso les ayuda a quedarse dormidos y, aunque puede causar el inicio del sueño, también hace que el sueño sea irregular.
Si te despiertas en la noche, no te quedes en la cama demasiado tiempo
Es posible que el estrés también te haga despertar en medio de la noche y no sólo bloquear tu capacidad para quedarte dormido. No debes quedarte en cama por más de 20 minutos tratando de relajarte, esto puede hacer que pienses en la causa de tu estrés y te cueste más trabajo dormirte.
Levántate y haz algo aburrido o relajante. Nunca enciendas la televisión ya que es un estimulante.
Si a pesar de todas las recomendaciones continuas con insomnio, deberás acudir a tu médico.