¿Qué es el sarampión?

Según la Secretaría de Salud de México, “es una enfermedad altamente contagiosa causada por un virus. Se caracteriza por fiebre, tos, secreción nasal, ojos rojos y erupción cutánea (exantema). Se transmite por contacto con gotitas provenientes de la nariz, la boca o la garganta de una persona infectada”.

Síntomas

La OMS describe los síntomas como “fiebre alta, que comienza unos 10 a 12 días después de la exposición al virus y dura entre 4 y 7 días. En la fase inicial, el paciente puede presentar rinorrea, tos, ojos llorosos y rojos, y pequeñas manchas blancas en la cara interna de las mejillas.

Al cabo de varios días aparece un exantema, generalmente en el rostro y la parte superior del cuello, que se extiende en unos 3 días, acabando por afectar a las manos y pies. El exantema dura 5 a 6 días, y luego se desvanece. El intervalo entre la exposición al virus y la aparición del exantema oscila entre 7 y 18 días (media de 14 días)”.

El riesgo por no vacunar

Desde 2017, el sarampión que se creía controlado en Europa (por encima del 95 % del umbral de vacunación) registró un aumento de 400 % en los casos con respecto al año anterior. Esta cifra disparó las alarmas en todo el continente, especialmente en Italia y Rumanía, países donde la enfermedad volvió con mayor fuerza y donde las autoridades han recomendado adelantar la vacuna triple viral a todos los niños menores de un año y mayores de 6 meses.

En los Estados Unidos, El CDC (Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades) ha detectado al menos 107 casos de sarampión en 21 estados distintos, la mayoría de personas que no fueron vacunadas, mientras que en Brasil los casos se duplicaron entre julio y agosto de 2018 y el último recuento oficial estima que poco más de mil 200 personas han contraído este virus. En el resto de América, al menos ocho países más se han declarado en alerta ante este brote: Antigua y Barbuda, Canadá, Colombia, Uruguay Guatemala, México, Perú y Venezuela.

¿Qué pasa en México?

En México, el Programa de Vacunación Universal incluye la triple viral –una inmunización contra el sarampión, las paperas y la rubéola– en el esquema obligatorio desde 1992. Esta vacuna se aplica en dos dosis: la primera a los 12 y un refuerzo a los 72 meses (6 años) de nacido y se considera completamente segura. Desde 1996 no existe registro de casos “autóctonos” de sarampión en territorio nacional, únicamente importados (contagiados por una persona infectada que llegó del extranjero).

En marzo de 2018, la SSA detectó cuatro casos de sarampión, tres en la Ciudad de México y uno más en Baja California; no obstante, el organismo ha descartado una y otra vez la aparición de una epidemia en nuestro país.