Después de un día ocupado, lo primero que queremos es llegar a casa a dormir, pero es importante saber distinguir la diferencia entre dormir y obtener un sueño reparador. En promedio, una persona tiene que dormir entre siete y nueve horas al día para obtener el tiempo suficiente y necesario de sueño, ya que un sueño de calidad proporciona muchos beneficios al organismo como una mejor memoria, sentidos más agudizados y más claridad para la toma de decisiones.
A continuación, enlistamos los beneficios de un sueño de calidad.
- Exhibirse al sol
Es bueno exponerse a la luz del sol durante el día, ya que contamos con un ciclo bifásico que se encuentra ajustado con el ritmo de la luz/oscuridad que al mismo tiempo está relacionado con la vigilia y el sueño.
- Evitar cafeína
Lo mejor es evitar el consumo de cafeína después de las tres de la tarde y cenar algo ligero una hora antes de dormir.
- Tener un horario
Es importante contar con una hora de ir a dormir y con una hora de despertarse.
- Lugar adecuado
Es fundamental contar con un colchón cómodo que se encuentre en un lugar oscuro y sin ruido para evitar cualquier interrupción.
Es importante cumplir con las características anteriores, ya que durante el sueño el organismo realiza ciertas funciones:
- Se modifica la fisiología del cuerpo
- El sistema cardiovascular descansa, ya que la frecuencia cardiaca y la presión arterial disminuyen.
- Se regenera la piel
- Se relajan los músculos
- El aparato digestivo tiene un funcionamiento diferente, debido a que la secreción con mayor acidez, se presenta en la noche.
Fuente: 24 horas