En lo que los investigadores llaman un logro sumamente innovador y el primero de su tipo a nivel mundial, un dron o avión no tripulado trasladó y entregó un nuevo riñón para trasplante. La beneficiada fue una mujer originaria de Baltimore (Estados Unidos) de 44 años.
El 19 de abril, el dron entregó el riñón del donante que fue trasplantado con éxito por un equipo quirúrgico en el Centro Médico de la Universidad de Maryland, en dicho estado. La paciente fue dada de alta el 23 de abril. Antes de la operación, se había sometido a ocho años de diálisis debido a una insuficiencia renal.
“Todo esto es increíble. Hace años, esto no era algo en lo que uno pudiera pensar“, dijo la paciente en un comunicado de prensa de la institución.
Este vuelo muestra cómo los drones podrían mejorar el acceso a los órganos para las personas en listas de espera para trasplantes.
Los aviones no tripulados podrían realizar entregas de órganos más rápidas, más seguras y más accesibles que los métodos tradicionales de transporte, señalaron.
“Como resultado de la destacada colaboración entre cirujanos, ingenieros, la Administración Federal de Aviación [FAA], especialistas en obtención de órganos, pilotos, enfermeras y, en última instancia, la paciente, pudimos hacer un avance pionero en el rubro de trasplantes“, comentó el doctor Joseph Scalea, líder del proyecto y uno de los cirujanos que realizó el trasplante.
“Sigue habiendo una enorme disparidad entre el número de receptores en lista de espera para trasplante de órganos y el número total de órganos trasplantables. Esta nueva tecnología tiene el potencial de ayudar a ampliar el conjunto de órganos donados y el acceso al trasplante“, apuntó Scalea.
Los investigadores mencionaron que el transporte de órganos es una de las partes más cruciales del proceso de trasplante. La cantidad de tiempo que un órgano puede permanecer viable mientras está en tránsito es crítica.
La entrega de un órgano donante “es un deber sagrado con muchas partes móviles. Es fundamental que encontremos formas de hacerlo mejor“, agregó Scalea.
Aunque los cirujanos conocen de antemano los pasos involucrados en el trasplante, el transporte no tripulado era territorio desconocido.
Matthew Scassero, director del sitio de prueba de sistemas de aviones no tripulados de la universidad, describió la tarea.”Tuvimos que crear un nuevo sistema que todavía estuviera dentro de la estructura reguladora de la FAA, pero que también fuera capaz de soportar el peso adicional del órgano, las cámaras y los sistemas de rastreo, comunicaciones y seguridad de órganos en un área urbana y densamente poblada, para recorrer una distancia más larga y con más resistencia”.
El avión no tripulado hecho a la medida y usado en este proyecto posee ocho rotores y múltiples motores para garantizar un rendimiento confiable, incluso en caso de falla de componentes.
Antes del vuelo innovador, el equipo desarrolló y probó el avión teledirigido mediante el transporte exitoso de materiales como solución salina y tubos de sangre, seguido de un riñón humano sano pero inutilizable.
Los investigadores resaltaron que el transporte de órganos actual suele ser costoso en vuelos chárter o vuelos comerciales, lo que ocasiona que un órgano se quedó en un avión u otros retrasos, dejaran el órgano inutilizable.
Los métodos actuales de transporte tampoco cubren adecuadamente las áreas rurales o remotas de los Estados Unidos, subrayaron.
En 2018, casi 114,000 estadounidenses se encontraban en listas de espera para trasplante, según la Red Unida para el Intercambio de Órganos. Pero el 1.5% de los órganos de donantes fallecidos no llegaron al destino previsto; y casi el 4% de los envíos de órganos tuvo un retraso imprevisto de dos o más horas.
Este trabajo se encuentra en la etapa de prueba de concepto. Si se demuestra que tiene éxito, se usarían drones que viajarían distancias mucho mayores para transportar los órganos.
Fuente: salud.carlosslim.org