Los primeros datos que se han publicado, del muy esperado estudio por la comunidad médica, “Aprender tempranamente acerca del cacahuate” (Leap, por sus siglas en inglés), muestran que la introducción temprana de cacahuates en la alimentación de los lactantes puede ofrecer protección contra el desarrollo de alergia a los cacahuetes. El estudio fue dirigido por el profesor Gideón Lack, del King?s College de Londres.
“Creemos que los resultados de este ensayo son tan convincentes, y el problema de la creciente prevalencia de la alergia al maní tan alarmante que muy pronto podamos esperar nuevas directrices en esta área de la ablactación”, señaló Hugh A. Sampson, Médico Cirujano, colaborador editorial. Sampson es ex-presidente de la Academia Americana de Alergia (AI) y actualmente es Director del Instituto de Alergias Alimentarias Jaffe, en la Escuela de Medicina de Icahn en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York.
El Prof. Lack y el equipo del estudio LEAP asignaron al azar 640 infantes con eczema severo, alergia al huevo o ambas, ya sea al grupo de consumo o al grupo que no ingiere cacahuetes hasta los 60 meses de edad. Se identificaron clústeres adicionales en el cohorte de niños SIN alergia aún al cacahuate: niños con sensibilidad al extracto de cacahuate e infantes sin sensibilidad (según lo determinado por las pruebas cutáneas)
Cabe destacar que la prevalencia global de la alergia al cacahuate en el grupo de quienes no comieron cacahuate fue del 17.2 por ciento a los 5 años, en comparación con sólo el 3.2 por ciento en el grupo de consumo temprano. La prevalencia de la alergia al cacahuate en niños con pruebas de la piel aún negativas temprano en la vida fue del 13.7 por ciento, en el grupo de No consumo de Cacahuate y del 1.9 por ciento en el grupo de consumo. Del mismo modo, los niños ya sensibles a los cacahuetes reflejan una prevalencia del 35.3 por ciento de la alergia al cacahuate en el grupo de No consumo de Cacahuate, en comparación con sólo el 10.6 por ciento en el grupo de consumo.
“El consumo precoz es eficaz, no sólo en los recién nacidos de alto riesgo que (aún) no muestran sensibilidad a los cacahuetes, pero también es eficaz en niños que ya demuestran la sensibilidad de cacahuate con una prueba de alergia cutánea positiva”, explica el primer autor George Du Toit, MB, BCH, también del King’s College de Londres.
Con información de esmas.com