Cuando alguien tiene gripa en la oficina, los demás huyen, o bueno, lo intentan. La verdad es que es muy fácil contagiarse de un resfriado en el trabajo, ya que los lugares son cerrados, el aire acondicionado está muy fuerte y las áreas de convivencia son pequeñas.

Aparte, en la oficina parece que se entra a un ciclo sin fin. Ya que cada uno se va contagiando, y a su vez ellos hacen lo mismo y cuando por fin está sano, alguien más los vuelve a contagiar. Pero no te preocupes, hay algunos tips que puedes seguir para que esto no te pase:

  • Evita lugares con gérmenes. Todo aquel lugar que tu sabes pudo haber estado en contacto con gérmenes, evítalo. Sabemos cómo se contagia la gripa, si podemos evitar estar en contacto con estos lugares, mejor.
  • Desinfectante todo el tiempo. Esto no sólo debería de hacerse cuando alguien tiene gripa en la oficina, sino en todo el año. Ponte desinfectante antes de comer y de tocarte los ojos, nariz o boca, después de saludar a alguien o de tomar algún objeto de la oficina. En pocas palabras, haz al desinfectante tu mejor amigo.
  • Espacios limpios, espacios sanos. Aparte de usar el desinfectante, limpia todos aquellos lugares con los que tienes constante contacto como la perilla de la puerta, el teclado de la computadora, el interruptor de la luz, etc. Recuerda que estás en constante contacto con estas superficies, por lo cual necesitan mayor limpieza.
  • Vacúnate. Aunque la vacuna de la influenza no es 100% efectiva, ayuda a disminuir el riesgo de un contagio.
  • Cuidado con el aire acondicionado. Muchas veces éste es el culpable de nuestras enfermedades, pero si tienes un suéter delgado en la oficina para cuando sientas frío, te paras a caminar constantemente para calentarte y consumes bebidas calientes, lograrás evitar que el aire acondicionado te enferme.

Recuerda que también es importante cuidar el área de oficina cuando se está del otro lado, es decir cuando estás enfermo por eso:

  • Cuando estornudes no te tapes con la mano. Utiliza un pañuelo o tu antebrazo, pero no la mano, ya que después puedes tocar alguna superficie y contaminarla.
  • Evita el contacto físico con otras personas. Ya sea un abrazo, un apretón de manos o un beso en el cachete, cuando se está enfermo es mejor evitar esto para no contagiarlos.
  • Lávate las manos. De esta forma hay menor probabilidad de pasar el virus.
  • No tengas miedo de pedir incapacidad. Si te sientes mal, es mejor trabajar desde casa o pedir el día, de lo contrario, estás poniendo en peligro a tus compañeros. Muchas veces no sabemos cuál es el momento indicado para pedir una incapacidad, todo va a depender de cómo te sientas, pero hazle caso a tu cuerpo.
  • Usa tapabocas. Con ello disminuyes el riesgo de contagiar a los demás.

Así que tener una oficina sana está en manos de todos, desde evitando contagiarte, hasta evitando contagiar. Es importante realizarlo, ya que es la salud de todos.

Fuente: Finanzas Personales